Un festín de carnicería en el regreso de The Walking Dead. El primer episodio de la temporada 5 cumplió con las expectativas, y no podemos estar más felices por ello. Esta es nuestra review del capítulo No Sanctuary.
Recuerda que: esta crítica no incluye comentarios o spoilers del cómic original.
Hace mucho tiempo que The Walking Dead no tenía un comienzo tan explosivo. Todo lo que se dijo y prometió antes de su gran estreno fue verdad, y tenemos ante nosotros uno de los mejores episodios de toda la serie. Los guionistas del drama más famoso de AMC lograron que este aglomerado de emociones sea plasmado con excelencia.
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Cuando Rick (Andrew Lincoln) finalizó la última temporada argumentando “Se están metiendo con la gente equivocada”, nadie tenía la menor idea de quién sería el verdadero artífice de este colosal enfrentamiento entre sobreviviente, caníbales, y caminantes. ¿Acaso sería Daryl? ¿O tal vez la propia Michonne con su catana? ¡Please, bitch! Se nota que no sabes nada de la fucking Carol…
Manual de superviviencia al estilo Carol
A medida que transcurrían los minutos fuimos descubriendo el lado más despiadado de Carol (Melissa McBride), que pasó de ser una atemorizada ama de casa cansada de los abusos de su esposo para convertirse en el mismísimo Chuck Norris. Este es el capítulo cumbre de Carol, sin duda, el personaje que más ha evolucionado durante el apocalipsis zombie, y sino, que lo diga la pequeña Lizzie (Brighton Sharbino).
¡No en mi guarida!
Carol implantó con audacia todas las habilidades que aprendió con el grupo de Rick. Un poco de sangre por aquí, algunas vísceras por allá, y listo, ya estamos preparados para derrumbar el fortín de un santuario de caníbales. ¡Con la ayuda de mi francotirador haré papilla Terminus y rescataré a Daryl! Así fue como el exilio de Carol terminó salvando a todos del matadero y permitió que la familia Grimes pueda reencontrarse. Ni qué decir del propio encuentro con Daryl (Norman Reedus) ¡Momento feeling!
Secretos, villanos y viejos amigos
Ahora que Terminus se desmoronó en mil trocitos, una nueva administración se apoderó de las instalaciones del santuario. A juzgar por los comentarios de los productores, estamos ante el nuevo villano de la serie, y por lo visto, el enemigo será más implacable que los viejos administradores.
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Por otro lado, el Dr. Eugene Porter (Josh McDermitt) ha revelado información importante sobre la cura del virus que arrasó con la humanidad. Sin embargo, en uno de los diálogos del primer episodio el sargento Abraham Ford (Michael Cudlitz) advirtió que aún nos aguardan muchos secretos por descubrir. Esto no ha terminado.
Y finalmente, no podemos obviar la escena post-créditos que trae de vuelta a uno de los personajes más enigmáticos de la primera temporada. ¿Qué anda haciendo el viejo Morgan por estos lares? ¿Y qué significa esa X tallada en un árbol?
En resumen: estamos más que satisfechos con el comienzo de temporada de The Walking Dead, un verdadero espectáculo que apacigua las críticas cosechadas en los últimos meses y pone las expectativas al tope.
Puntaje: 9/10 Escenas gore, acción, drama, y una Carol bajo la manga que se robó el show.